(Major Dundee, 1965)
Artículo anterior: Duelo en la alta sierra
Sería a raíz de Duelo en la alta sierra que Charlton Heston llamó a Peckinpah para ofrecerle trabajar en una película que estaba preparando.
Mayor Dundee se sitúa en la guerra civil americana y cuenta la historia de un oficial que lidera a todo su escuadrón y a un grupo de presos para acabar con los indios que han estado causando estragos en la zona. En su recorrido, se enfrentarán no sólo entre sí, sino al mismísimo ejercito francés.
Entre el reparto encontramos al siempre eficiente Richard Harris y a un buen puñado de colaboradores de Peckinpah, como son Ben Johnson (que repetiría en Grupo Salvaje, El rey del rodeo y La huida) y los ya mencionados Warren Oates, L.Q. Jones y R.G. Armstrong.
Charlton Heston tenía plena confianza en Peckinpah, aunque éste le presionara hasta lo indecible; pero no era un sentimiento compartido por los productores. El abuso de alcohol por parte del director hizo temer a los productores que no estuviera al nivel de la película, en la que, tras pequeñas producciones, manejaba su primer gran presupuesto. Sus constantes desavenencias con el productor, terminaron echándole fuera de la sala de montaje, haciendo de Mayor Dundee, como Compañeros mortales, una película montadas y terminada sin la aprobación de su propio director.
Aun así, el resultado es muy superior al de su primera película, aunque se queda lejos de Duelo en la alta sierra. Y es que la implicación de Peckinpah, aunque no fuera en la postproducción, se nota.
La película pivota en torno a dos hombres (esplendidos Heston y Harris), cuya relación si bien oscila entre el amor y el odio, es siempre digna y respetuosa y nos retrotrae en cierta forma a los dos protagonistas de Duelo en la alta sierra; siendo este elemento lo más aprovechable del conjunto.
Por otro lado, un nuevo elemento en la carrera de Peckinpah se introduce aquí, y hace referencia a los antihéroes. Así como en su anterior película el personaje de McCrea representaba la ley y el orden, los protagonistas de Mayor Dundee no tienen inconveniente en plantar cara a todo el ejército francés. Si bien continúan siendo personajes buenos y heroicos, vemos que es un perfil que está menos delimitado y que, hasta cierto punto, nos prepara para lo que estaba por venir.
La película, filmada sin Lucien Ballard (que volvería para la siguiente), presenta momentos interesantes (la mencionada relación entre los dos protagonistas, detalles de la dirección), pero carece de suficiente garra y termina perdiéndose en un espectáculo vacío, especialmente en su segunda mitad.
Mayor Dundee, bien sea por el guión, por la dirección o por el montaje, es una película que, aunque interesante y entretenida, termina cayendo sin aprovechar todo su potencial. Pero, desde luego, fue indispensable para que Peckinpah diera el paso entre Duelo en la alta sierra y Grupo Salvaje. Y es que esta película le sirvió para aprender a manejar grandes presupuestos y aprender de sus errores, especialmente en toda su escena final (bastante confusa y a años luz de lo que sería capaz).
Como suele pasar tantas veces, años después de que Peckinpah muriera, alguien decidió que sería rentable sacar un montaje de la película aproximado a su visión. El Mayor Dundee que existe ahora en DVD incluye escenas eliminadas en su día y cambia la banda sonora original de Daniele Amfitheatrof (que disgustaba al propio Peckinpah) por una acertada composición actual de Christopher Caliendo. Así, se da el curioso hecho de que existan dos versiones de Mayor Dundee y ninguna pueda ser considerada la de su director.
Siguiente artículo: Grupo salvaje, un western para la historia
No hay comentarios:
Publicar un comentario